Los ingredientes empleados en las “tortillas piratas” pueden llegar a se nocivos para la salud
Aunque las tortillas son un alimento habitual en la dieta de los mexicanos, su calidad es un aspecto que recientemente ha preocupado a las autoridades debido a la existencia de las “tortillas pirata”.
Estas tortillas ponen en riesgo la salud de quienes las consumen, debido a que incluyen ingredientes no aptos y poco salubres con el fin de aminorar su costo de producción.
Según el Consejo Rector de la Tortilla, las tortillas pirata están hechas con maíz rezagado, harina de maíz, agua no potable, cal en grandes cantidades y tortillas de días anteriores.
En contra parte, las tortillas originales están hechas exclusivamente por masa de maíz, una porción de cal y agua. La cal empleada para hacer tortillas no es la misma que se usa para la construcción, sino que debe ser la denominada “cal viva”, que ayuda al proceso de mixtamalización.
¿Cómo identificar las tortillas pirata?
Para identificar una tortilla pirata, se recomienda revisar su apariencia, olor y textura. Según el Consejo Rector de la Tortilla las principales características a considerar son:
- Un mal olor, el cual se puede disminuir con un excedente uso de cal
- También se puede observar que la masa de las “tortillas pirata” es blanca, cuando el color que debe tener es “crema”, pues contiene los pigmentos del maíz
- Una tortilla original huele a maíz y tiene pigmentos amarillentos
- Las tortillas bien elaboradas tiene una textura suave, pero que no se agrieta ni rompe.
- La textura de las tortillas debe ser gruesa y consistente; además, deben reaccionar bien al recalentamiento, pues se deben inflar
- Las tortillas originales pueden guardarse en una bolsa de estraza dentro del refrigerador; se conservarán hasta por tres días o más
- Las “tortillas pirata” pueden tener un precio bajo, respecto al promedio en el que se encuentra
- Al comerla no debe tener un sabor a tierra, cal o que esté muy salada
Es importante recordar que la prioridad es cuidar la salud de los consumidores, ya que el comprar “tortillas pirata” a un menor precio podría suponer un gran peligro para el cuerpo y provocar una intoxicación.
¿Qué hacer para evitar el riesgo de adquirir “tortillas pirata”?
El Consejo Rector de la Tortilla recomienda:
- Compra en tortillerías en las que se pueda observar el proceso de elaboración (maquinaria, manejo de la masa y condiciones de higiene)
- Evita comprarlas en otro tipo de establecimientos como tienditas, pollerías o recauderías
- Si el precio es menor, debes dudar de las materias primas con las que se elaboró
- Si se detecta la venta de “tortillas pirata”, se puede denunciar ante la Profeco