Para seguir operando en el AICM y evitar multas, choferes de taxis privados de apps simulan alguna relación familiar con sus usuarios.
Anselmo tenía un vuelo con destino a Cancún desde la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), iba tarde y utilizar el Metro para llegar al complejo ya no era opción; se arriesgó a tomar un taxi por aplicación pese a que conoce de las sanciones para los conductores por realizar esta acción.
Al pedir el servicio, alrededor de 6 conductores registrados en Uber rechazaron el viaje. En la plataforma de Didi, fueron 4. Al séptimo intento, Anselmo tuvo suerte y consiguió el viaje, no sin antes recibir una llamada del conductor quien le dio instrucciones para poder realizar la travesía.
Su equipaje, aunque era sólo una maleta de 12 kilos debía ir en la cajuela para evitar levantar alguna sospecha entre los taxistas autorizados en el aeropuerto capitalino, marinos y policías capitalinos; además, no pondría en un lugar visible su teléfono para seguir la ruta marcada por la aplicación.
Tercero, Anselmo debía viajar en la parta delantera, como copiloto, y simular una relación, de amigos o parentesco, con el conductor. Simular un abrazo, que despistara a las autoridades y no realizar pagos en efectivo, todo a través de la aplicación.
Al llegar al AICM, el conductor abrazó a Anselmo, se bajó de la unidad y sacó su equipaje, le deseó buen viaje y le dijo que le avisara la hora de su regreso para ir a recogerlo al siguiente día. Una oficial de tránsito que realizaba rondines por la puerta 6 de la Terminal 2, le pidió mover su automóvil y evitar estar más tiempo en la terminal.
Aunque hay vehículos de la Marina y oficiales capitalinos controlando el tránsito sobre las terminales del AICM, para con ello evitar que los conductores de aplicaciones puedan recoger pasaje y dejarlo, éstos han encontrado diversas formas para bajar su perfil y continuar con sus operaciones en el complejo aeroportuario.
En un recorrido, la revista Forbes México constató que la demanda de usuarios de taxis privados por aplicación no ha bajado, sin embargo, la discreción sí. Ayer, en un recorrido por la noche, se pudo observar al menos 5 usuarios de plataformas simular alguna conexión con choferes para burlar a la Policía.
“Nos están obligando a actuar en una especie de clandestinidad que no acepto, pero me veo forzado a complacer. Un taxi del aeropuerto hasta mi casa tiene un costo de 450 pesos, en Uber 150, no hay comparación”.
“Algunos nos piden acercarnos al metro Terminal Aérea por el lado del Circuito Interior para evitar problemas, pero los usuarios deberíamos ser libres de subirnos al taxi donde estemos parados”, narró Eduardo, quien salió de la puerta 4 de la Terminal 1 a abrazar al chofer de Uber para abordar la unidad y no levantar sospechas.
Desde hace unos meses, en las salidas del AICM hay letreros con una advertencia dirigida a los usuarios de apps de movilidad en la que señala de la aplicación de multas por hasta 43 mil pesos contra los conductores de aplicaciones de Uber y Didi que presenten sus servicios en las instalaciones.
Esta es una reacción de la antigua dirección del AICM, encabezada por Carlos Morán Moguel, ante las presiones de corporaciones de taxis autorizados para operar en las instalaciones ante lo que consideran es una competencia desleal por parte de las platafomas.
En una manifestación ocurrida el pasado 24 de mayo, los taxis autorizados para operar en el AICM bloquearon los accesos a la terminal y exigieron la regulación inmediata de los servicios de conductores por aplicación móvil.
De acuerdo con la información obtenida al 26 de junio de este año, los concesionarios de taxis adeudan 130 millones 832 mil pesos y enfrentan una decena de juicios por el impago de servicios y renta de espacios y locales ocupados al interior del aeropuerto.
En conferencia de prensa, el gremio de taxistas que opera en la terminal aeroportuaria acusaron que los plataformas de Uber y Didi les quita a 4 de cada 10 usuarios, lo cual afecta a los ingresos de alrededor de 2 mil choferes autorizados y que pagan impuestos en el complejo federal.
Sergio Andrade Ramírez, presidente de Taxistas Agremiados para la Prestación del Servicio de Transportación Terrestre Sitio 3000 A. C., consideró que debe aplicarse la multa por 43 mil pesos a los conductores de servicio de taxis por aplicaciones móviles.
“No se están aplicando esas multas porque la Marina acaba de entrar, el mando. Quien infraccionaba era la Guardia Nacional, ahora está la Marina, que lo que está haciendo es evitar la carga a través de las aplicaciones”, comentó Andrade.
El representante de los taxistas afirmó que ya existen platicas con la Marina para que se designe personal lo suficientemente capacitado para infraccionar a los conductores de Uber y Didi que recojan pasaje en el AICM.
“De que los van a infraccionar, los van a infraccionar. Apenas hay pláticas y acercamiento para ver de que manera podemos atacar en su conjunto este problema del aeropuerto”, añadió.
Homero Pantoja Rivas, representante legal de Transporte Terrestre Turístico S. A. de C. V., consideró que Uber engaña a sus usuarios al asegurar que su operación no violenta el marco jurídico aplicable y de manera dolosa llama a utilizar la aplicación en las instalaciones del aeropuerto.
A principios de este mes, Uber de México informó que seguirá prestando sus servicios de taxi privado en el AICM, por lo que invitó a sus usuarios a utilizar su app sin mayores contratiempos.
En un mensaje dirigido a sus clientes, Uber señaló que no existe ninguna restricción en el marco jurídico que impida su operación, por lo que no resulta aplicable ninguna sanción por parte de las autoridades aeroportuarias.
“De acuerdo con el marco jurídico vigente, para la prestación de servicios de transporte privado a través de la app de Uber en el AICM, no se requiere de la obtención de permiso alguno, por lo que no resulta aplicable ninguna sanción relacionada”, expuso la compañía.
“Reiteramos nuestro compromiso con los miles de usuarios en los aeropuertos del país que buscan en Uber una solución para moverse de manera eficiente y confiable”.